¿ES NECESARIA UNA REFORMA AL SISTEMA DE SALUD EN COLOMBIA? ¿QUE TAN ESTRUCTURAL DEBERÍA SER?

Como se revisó en el artículo anterior, Colombia aparece en las clasificaciones de los países con sistemas de salud de buen desempeño aunque nuestra economía frente a los demás incluidos en el análisis no es fuerte y tenemos dificultades de equidad y justicia social.

La proporción del PIB Salud y el PIB percapita en salud es comparable con economías más fuertes , y tenemos una cobertura de aseguramiento alta que no necesariamente significa cobertura universal en salud (CUS).

Entonces, ¿se necesita o no una reforma al sistema de salud actual?, la respuesta es positiva si queremos llegar a la cobertura universal en salud en términos de equidad y del logro de los objetivos en salud, aún en momentos de dificultades económicas y de ser sostenibles.

Sin embargo, tratar de responder que tan estructural debe ser dicha reforma, es la cuestión que debemos abordar como Colombianos.

Primero: los resultados del sistema de salud no solo son responsabilidad de los actores del sistema, puesto que existen aun determinantes en salud que no han sido gestionados por el estado de manera efectiva, como son entre otros:

  1. Acceso al agua potable

  2. Acceso a la nutrición adecuada (seguridad alimentaria)

  3. Entornos seguros, sin violencia.

  4. Acceso al trabajo digno

  5. Mejor infraestructura que facilite el desplazamiento de las personas en dispersión geográfica a zonas urbanas.

  6. Mejor infraestructura en el área rural.

    Entre otros que permitirían disminuir las desigualdades sociales que afectan al país.

Entonces la prioridad en política pública no debería ser el cambio a la estructura del sistema de salud, sino modificar los determinantes que por definición afectan los estilos de vida saludables.

Porque no existirá inversión en salud que logre resultados sin el ajuste a los puntos arriba señalados.

Ahora bien, si se logrará un mejor indicador en términos de productividad, acceso al trabajo digno, los colombianos aportaríamos más por la contribución de la seguridad social y disminuiría la carga de pagar las UPC del régimen subsidiado, lo que facilitaría lograr que el estado pueda resolver la inequidad existente entre la UPC del contributivo y el subsidiado.

Por otro lado con esa menor carga el estado podría aumentar la inversión en infraestructura hospitalaria pública en zonas de dispersión geográfica, donde existe poca o nula oferta de instituciones de salud.

En este contexto el estado se ocupa de lo prioritario e importante, y el funcionamiento del sistema podría seguir su dinámica actual que hasta ahora ha permitido los logros que algunos colombianos no queremos aceptar se han tenido durante los últimos casi treinta años.

Ahora en términos de la sostenibilidad del sistema actual, donde es claro que las EAPB tienen dificultades para lograr las reservas económicas (reservas técnicas), que un asegurador de cualquier sector debe tener para honrar sus compromisos a los asegurados y proveedores (en el caso del sistema de salud, prestadores de servicios), el cambio estructural debe llevar a:

  1. Mejorar la oferta de servicios hospitalarios en zonas de dispersión geográfica, que permita a las EAPB, tener con quien contratar los servicios que la población requiera.

  2. Lograr el equilibrio entre la UPC del régimen contributivo y subsidiado.

  3. Corregir y aclarar la metodología de reconocimiento de los presupuestos máximos para las tecnologías no PPS.

  4. Continuar la senda de optimización de precios de medicamentos y dispositivos médicos, de una manera clara, justa y equitativa para la cadena de suministros.

  5. Definir formulas de distribución de la población entre aseguradores, para disminuir la brecha que existe entre EAPB concentradas en zonas urbanas vs las EAPB que tienen la carga de la dispersión geográfica.

  6. Definir la capacidad mínima y máxima de una EAPB en términos poblacionales.

  7. Definir zonas geográficas de alta dispersión donde el volumen de afiliados al sistema no permiten el funcionamiento correcto de las reglas de juego del mismo, en dichas zonas el estado debería ser quien se ocupe de la salud de esa población y las UPC de estos usuarios no harían parte de los ingresos de alguna EAPB. En otras palabras existen zonas del país donde el único asegurador viable es el estado, y ahí debería estar el esfuerzo de la política publica para lograr la equidad en términos de cobertura universal en salud. En este punto los aspectos relacionados con buscar disminuir las fugas por corrupción de los gobiernos locales, deberían ser también una prioridad.

  8. Fortalecer e incentivar las redes integrales e integradas de atención que faciliten el flujo del usuario entre oferentes primarios y complementarios, sin que medien procesos administrativos que generen obstáculos al acceso.

  9. Fortalecer el IETS como ente investigador que permita definir hacia donde dirigir los esfuerzos.

  10. Definir la nota técnica del sistema de aseguramiento en Colombia, en términos de UPC (la cual se hace hoy) y en términos de gasto y distribución, con esto se lograría que las EAPB tengan unos mínimos y máximos para el gasto destinado a la atención primaria en salud, y el gasto de recuperación de la salud de la mediana y la alta complejidad. Dicha nota técnica sería el parámetro de medición y sus desviaciones facilitarían entender en que nos gastamos los recursos en salud, entendiendo que dicha nota técnica nacional debe considerar las diferencias entre las regiones y la caracterización de la población.

  11. El sistema de información en salud de orden nacional, no puede aplazarse más, sin embargo hay que ser objetivos y prácticos en el sentido que se han realizado esfuerzos de los actores por solucionar las necesidades de tecnología de la información, y el sistema de información nacional debe facilitar construir sobre lo ya construido, pues la inversión realizada hasta ahora no debería ser descartada. En ese sentido existen alternativas de integración e interoperabilidad a las cuales debería darse prioridad.

  12. Continuar en la senda del reconocimiento de las diferencias culturales de la población indígena, para facilitar el acceso a los servicios de salud.

Entonces, según este análisis, el sistema requiere reformas, pero no sobre la estructura del sistema sino sobre los problemas estructurales del país que no facilitan mejores resultados y sostenibilidad, y los ajustes que se deben hacer al sistema deben ser sobre los aspectos que faciliten un mejor funcionamiento.

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REFORMA AL SISTEMA DE SALUD, UNA REVISIÓN A LA PROPUESTA ACTUAL

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REFORMA AL SISTEMA DE SALUD EN COLOMBIA | DATOS Y HECHOS